ZARAGOZA
¡Vamos de estrene!
Allá voy con mi blog en el que intentaré mostrar, entre
otras cosas y conforme a mi criterio, aquellos rincones que no os deberíais
perder.
Empezamos con una escapada a Zaragoza.
Os recomiendo un descanso con limonada natural o un
cappuccino delicioso acompañado de un esponjoso trozo de bizcocho de chocolate
o una fantástica porción de tarta de zanahoria y chocolate que pondrá la guinda
a vuestra jornada cultural una vez hayáis disfrutado de vuestra visita a la Basílica del Pilar y
paseado y fotografiado en su notoria y gran plaza: Café BOTÁNICO.
Muy próximo a la plaza del Pilar, accediendo a través de un
pasaje contiguo a dicha plaza, encontraréis este café ecléctico, de inspiración naif con cierto aire vintage…
toda una fusión de estilos. Recomendable si buscáis un ambiente especial, fuera
del itinerario más turístico.
Después, una se puede
relajar callejeando por el centro, disfrutando del apacible sosiego de la
ciudad mientras descubres pequeñas grandes tiendas de moda y decoración que no
te dejarán indiferente siempre que el shopping o el curio-shopping (curiosear
compres o no) sea una de tus aficiones viajeras.
Al día siguiente, si no la conoces, puedes darte una
vueltecita por Huesca y conocer esta recogida ciudad con gran patrimonio
cultural.
Mis huesos, como van a lo mío, acabaron dando con una tienda
de comestibles de solera e historia: ULTRAMARINOS LA CONFIANZA, que desarrolla
su actividad desde 1871; casi nada!!
Si pasáis por Huesca deberíais entrar, no solo para verla,
que merece la pena, sino a comprar alguno de sus productos tradicionales o
delicatesen. Su bodega-museo, en el sótano es una visita obligada para los
amantes de lo vintage.
Graffitis&Huesca...
De vuelta nuevamente a Zaragoza. Esta vez nos damos un
respiro en El Laurel Espiritual, sito en la plaza San Francisco. Probad el
sorbete de mandarina. UUHHMM… muy rico. Decoración balinesa, música chill-out y
amplia carta de bebidas,… un lugar estupendo para tomarte un fresco respiro en
una calurosa tarde en Zaragoza. Sin fotos. Sin batería.
Fin de la escapada por tierras aragonesas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario